Visitas en Tokyo: Harajuku, Yoyogi y Akihabara

Este día sí que nos lo tomamos con calma. Sobre las 11, después de haber desayunado en la kurumi, salimos en dirección a Harajuku, barrio famoso por su juventud y sus tendencias.

Paramos en la estación de la JR de Harajuku (Línea Yamanote) y allí fuimos hacia el Meiji Jingu, templo situado dentro del Parque de Yoyogi. Como era domingo fuimos al puente de Yoyogi (que hay a la entrada del parque) para ver a las gothic-lolitas, pero la verdad es que casi no habían. Cuando fui hace tres años nos encontramos bastantes, pero esta vez habían pocas y casi todas la que habían eran extranjeras que habían ido allí. Al volver Clara me explicó que las gothic-lolitas se habían cansado de los turistas y que ahora estaban desperdigadas por las calles adyacentes a Takeshita-dori.

El camino que lleva al Meiji-jingu es muy bonito, ya que esta todo rodeado de árboles enormes. El templo esta bastante bien y al ser domingo las bodas se sucedían una tras la otra. Eran bodas tradicionales y los novios llevaban el kimono tradicional, fue muy bonito pero no nos pareció sorprendente, pues el día anterior habíamos estado en una. También en el templo pudimos encontrar a muchos niños vestidos con kimono, y la verdad es que eran monísimos.

Después de pasear por el parque nos fuimos hacia Takeshita-dori a pasear y chafardear por las tiendas de ropa. Aunque la verdad es que la calle estaba tan llena de gente que cuando llevábamos 50 metros nos desviamos por una calle lateral. Así fuimos paseando hasta Omotesando que es uno de los barrios más chic de Tokyo. Es curioso que entre Takeshita street y Omotesando habrá exactamente unos cientos de metros y sin embargo son dos zonas totalmente opuestas. Un par de tiendas a destacar en Omotesando son el BAZAR ORIENTAL y la KIDDY LAND.

El Bazar oriental es una tienda de souvenirs. Esta muy bien porque puedes encontrar casi de todo y no es excesivamente cara (aunque, personalmente, el mejor sitio para comprar souvenirs es Kyoto). La otra tienda a destacar es la juguetería Kiddy Land, que diría que tiene 6 plantas. Es recomendable por la cantidad de cosas monas y frikis que tiene. Pero ir en domingo fue mala idea, porque estaba llena de familias y niños disfrazados por Halloween, así que no pasamos de la puerta.

Con la frustración encima nos fuimos a comer un ramen en restaurante que había cerca del parque de Yoyogi, y nos comimos los fideos en la barra viendo la gente fluir por la calle.

Después de comer cogimos el tren hasta Akihabara, el barrio de la electrónica y el frikismo por excelencia. Estuvimos paseando y mirando tiendas de electrónica, pero con la bajada que había sufrido el euro, las cosas no salían nada baratas. Estuvimos mirando tiendas de comics y al final nos fuimos porque yo me asquee de ser la única fémina entre tanto otaku. No sé porque me dio tanta grima esa situación…

Cansados de caminar y del ruido de las calles nos fuimos hacia el apartamento y cenamos en un baratísimo restaurante de udon (sopa de fideos gordos). Este restaurante esta súper bien porque el bol de udon salia por unos 200 yenes y cada pieza extra 100 yenes, por lo que te ponias como el kiko por cuatro duros. La pena es que no recuerdo el nombre, pero si recuerdo que estava en frente del CAT en Suitengumae.

Direcciones de interés:

KIDDY LAND: 6-1-9 Jingu-mae, Shibuya-ku, Tokyo

ORIENTAL BAZAAR: 5-9-13 Jingumae, Shibuya-ku, Tokyo

KYUSHU JANGARA (RAMEN RESTAURANT): 1-13-21 Jingumae, Shibuya-ku, Tokyo

Bonita vista del río Sumida, al lado de la Kurumi Manshion.